Renovado hasta 2028. El Lenovo Tenerife y Txus Vidorreta han anunciado en la mañana de hoy que seguirán juntos las próximas cinco temporadas, tal y como te adelantamos hace un mes en Basket Aurinegro. Su contrato finalizaba en junio de 2024, por lo que se ha ampliado por cuatro cursos más. El acuerdo se ha anunciado en una rueda de prensa conjunta, en la que han participado Félix Hernández (presidente del club), Aniano Cabrera (director deportivo) y el propio Txus Vidorreta.

Tras su llegada en 2015 al Lenovo Tenerife, Vidorreta vivirá este año su octava campaña en la isla, en el club donde más éxitos ha conseguido en su carrera deportiva. Uno de los pocos entrenadores que desde el curso 2018, acumula un 50% o más en porcentaje de victorias, unos números al alcance de muy pocos directores de orquesta en la competición. 

«Para mí es un honor realizar una extensión por cuatro temporadas más, porque pocos equipos demuestran esa confianza en los entrenadores y yo creo que nuestro grado de cohesión entre nosotros es total. Estoy muy contento; a lo largo de estas temporadas siempre hemos ido creciendo y nuestro objetivo es el mismo, seguir confiando en los jugadores que tenemos y tratar al mismo tiempo de ir dando pasitos, para que, si hay que hacer cambios, no nos suceda como hace unas temporadas, que tuvimos que cambiar toda la plantilla», afirmó Vidorreta. 

«Ambas partes estamos seguras de que dar una estabilidad a largo plazo, al estilo de la NCAA, puede significar marcar el camino y que nuestra apuesta por el talento, por el buen juego y por competir cada uno de los partidos, no va a cambiar. Es un mensaje que enviamos al baloncesto a nivel nacional e internacional, pero sobre todo a nuestra afición, ya que estamos inmersos en la campaña de abonados, y queremos decirles que estamos aquí y que lo hacemos para quedarnos. Estamos en 2023 y tenemos ambos (club y Txus) una trayectoria en común extraordinaria, y que por tanto tenemos la confianza de que realizando un proyecto a largo plazo, al estilo americano, vamos a conseguir mantenernos junto a los mejores, que es nuestro principal objetivo», concluyó.  

«Fran Guerra y Joan Sastre están lesionados. La lesión de Fran está evolucionando muy bien, mientras que lo de Joan fue una contusión en la mano, pero hay que tener precaución, y más en pretemporada. Por tanto, son bajas casi seguras para el partido del jueves. También tenemos a dos jugadores que están pendientes de llegar, que son Marcelinho Huertas y Dusan Ristic. Marcelinho ha vuelto del mundial con problemas físicos, y además tiene que mover una familia muy grande, por lo que está pendiente de la evolución del problema que arrastra. Elgin Cook y Jaime Fernández tuvieron que pasar por «boxes» la semana pasada, más por prevenir que por un motivo de lesión, pero pensamos que como teníamos tantas bajas, pues era mejor parar y olvidarnos de jugar en Barcelona con cinco jugadores disponibles. Es una situación que vivimos el año pasado, somos optimistas y creemos que podemos empezar en la línea que nos permita seguir compitiendo por nuestros objetivos a pesar de estas dificultades, y sabiendo que cuando vayamos recibiendo y recuperando jugadores, vamos a estar en condiciones de competir contra cualquiera», añadió.

«Tengo claro que si tenemos cinco jugadores profesionales, y seis que están entre el junior y el Sub-20, no puedes jugar partidos, porque al final vas a poner en riesgo la salud de esos jugadores profesionales que te quedan. Y más cuando en el baloncesto prima tanto lo físico desde la pretemporada, ya que no se juegan partidos de preparación como hace años, porque aquí va a saco todo el mundo desde el primer día; por lo tanto nosotros vamos a ir a saco cuando tengamos jugadores para ir a saco. El jueves no estarán Marce ni Dusan, y probablemente tampoco Fran y Joan, pero seguimos teniendo la posibilidad de jugador con nueve seniors, y cuatro jugadores junior que nos puedan ayudar a completar la rotación», confesó.  

«Tenemos muy claro cual es nuestra línea de actuación. Nuestro primer y único objetivo es seguir trabajando al máximo nivel con el Lenovo Tenerife, devolver la confianza que se me ha transmitido, y si ahora que se puede, pues en algún momento en los próximos cinco años, puede surgir una posibilidad de entrenar a una selección, es una puerta que nos dejamos abiertas las dos partes. Es decir, seguir siendo entrenador del Canarias, y además tener la oportunidad de dirigir a una selección que me permita estar en unos Juegos Olímpicos como primer entrenador, o en un Campeonato del Mundo como el que se acaba de producir. Exceptuando eso, no hay resquicio; es un contrato cerrado hasta 2028, en el que las dos partes tenemos claro que queremos seguir caminando juntos», sentenció.